06 septiembre 2006

IBERIA, líneas aéreas de ¡España!

hace poco vi una foto en casa de un amigo. Es una instantánea curiosa en blanco y negro en la que aparece este caballero bajando de un avión de Iberia de los años 60. En aquellos tiempos la gente no solía viajar en avión así que, a modo de recuerdo, se podía adquirir una fotografía de uno bajando por la escalerilla, (como las que te hacen en el zoo o en el parque de atracciones). ¡Qué tiempos aquellos en los que podías contar un vuelo de Iberia como una experiencia satisfactoria! Y hay que ver cómo ha cambiado la historia.

Desde aquellos días a hoy hemos pasado de estar orgullosos de nuestra línea aérea a echar pestes de ella un día sí y otro también. Y no sin razón. Seguro que habré volado con estos impresentables más de cien veces y no recuerdo una sola en la que el vuelo haya sido totalmente puntual. Hoy sin ir más lejos tenía que llegar a Valencia a las 09:30 y he llegado a las 10:15 ( "pues no sé de qué te quejas", supongo que pensáis ). El regreso ha sido algo más complicado. Tras llegar al aeropuerto a las 17:00 estresado por la hora (pues mi vuelo salía a las 17:45) me he encontrado (cómo no) con el consabido retraso de 30 minutos (¡hay pardillo, y tú con tanta prisa!) y luego de otros 30 más. Es que encima los muy mamones lo hacen de tal manera que no puedes hacer nada más que quedarte como un pasmarote sentadito junto a la puerta de embarque, pendiente de que te llamen como a un ternero al sacrificio.

Es que hay que joderse. Ellos se retrasan cuándo y cómo quieren y si reclamas se ríen de ti (aún estoy esperando el pago de una maleta que me rompieron en Murcia hace dos años). ¡Y hay de ti si llegas un minuto tarde al embarque! ¡si hasta te miran mal mientras te bajas los pantalones suplicando clemencia por tu tremendo error! En una ocasión en Málaga tuve que amenazar a un tipo que no me quería dar la tarjeta de embarque porque llegué ¡dos! minutos tarde. Si le cojo una hora después me lo había comido crudo, pues finalmente el vuelo salió con hora y media de retraso.

Así que después de todo no queda otra opción que respirar hondo y armarte de paciencia. Después de tantos vuelos me doy cuenta de que incluso miro con lástima a los que se cabrean como monos ante las injusticias de Iberia. Está claro que he tirado la batalla. Total, al fin has de agradecer que llegas sano y salvo, lo cual a veces parece casi un milagro (hoy el piloto abortó el aterrizaje a unos 20-30 metros del suelo y nos tocó volver a subir y esperar turno. Al final, hora prevista de aterrizaje, 18:45; hora real, 20:00).

Gentuza.

3 comentarios:

  1. No se Zorro, igual tienes el gafe con Iberia porque yo he tenido algunas veces retrasos y otras una puntualidad "británica", si ir mas lejos mis experiencias este verano Madrid-Marrakech-Madrid fueron milimétricas ¡¡y eso en la T4!!

    ResponderEliminar
  2. O sea ¡que encima hay una lista negra para los pasajeros que alguna vez hemos reclamado! Lo dicho, gentuza.

    Por cierto Caracolico, no has contado nada en tu blog de tus "Xperiencias" en el Morocco.

    ResponderEliminar
  3. Veo que tus problemas son mayores que los míos con Iberia. Consuela saber que soy el único.
    Saludos.

    ResponderEliminar