Gabriel Cisneros
desde que comencé a estudiar Derecho, allá por 1989 no he dejado de sentir orgullo por los llamados "padres de la constitución". Yo les llamaría los ases del consenso. Aquellos hombres fueron, ante todo, diplomáticos capaces. Cada partido envió a sus mejores comerciales para debatir y acordar el texto que articularía y articula la convivencia política de España. Seguro que fue una dura negociación pero estaba claro que había de salir bien pues por delante de los intereses particulares habían puesto el bien de nuestro país, la luz del progreso para la España de la caverna y las sombras distorsionadas.
Gabriel Cisneros fue uno de estos hombres. Con 66 años no era uno de los más ancianos de entre ellos, pero una enfermedad se ha llevado su vida. Breve existencia para tan valiosos merecimientos.
Gracias, Gabriel. A estas alturas quizá no nos damos cuenta de que la "crispación" actual entre las fuerzas políticas no tiene parangón con la que había en 1976, y por desgracia olvidamos el valor de vuestra gesta constituyente. Luego comparamos entre los POLÍTICOS de entonces y los politicuchos de hoy y... se nos saltan las lágrimas.
Muchos diplomáticos nos hacen falta...Pero no de los llevan la matrícula roja en su coche...
ResponderEliminar¡ Cómo aprendo contigo!!!!
Sí, lastima que cada vez que vamos a las urnas nos toque elegir entre lo malo y lo peor
ResponderEliminarTiene cara de buena persona, y por lo que cuentas, lo era, y defendía ideales que ahora mismo viven obsoletos en cabezas de muchos que los usan cómo bandera, pero jamás los defienden.
ResponderEliminarLo siento.
Siempre digo lo mismo.
Se van los mejores.
un beso fuerte,
MALE
En efecto, cada vez que toca urna hemos de elegir entre lo malo y lo peor. Y lo más grave es que como en el chiste aún nos tocará bajarnos los pantalones, toda situación es susceptible de empeorar.
ResponderEliminarAhora no tenemos políticos, existen pequeños reyezuelos de taifas y pusilánimes adoradores del sillón decididos a ceder cuanto sea necesario por conservar la poltrona.
Desolador panorama, desde luego.
Zorro, dirás que es mi ojito derecho (o izquierdo en su caso) y todo eso, pero ver llorar desconsoladamente a Carmen Chacón por la muerte de Cisneros dice mucho de como era el bueno de Gabriel
ResponderEliminarPd. Este año tengo días sueltos de holidays. Lo mismo me escapo un par a Collau
toda la zorrería en pleno te daremos la bienvenida en Collado, amigo tigre
ResponderEliminarTu lo has dicho zorro, hace años los políticos eran capaces de sentarse en una mesa y discutir, debatir, mandarse a tomal pol culo mil veces y volver a sentarse a la mesa para seguir negociando, y sobre todo por el bien común de la Nación Española (que algunos conocieron sin derechos). A día de hoy no son capaces de sentarse ni para evitar que los habitantes de España salten en pedazos si la gentuza de Eta coloca un pepino explosivo.
ResponderEliminarYo me he preguntado a veces si los políticos actuales no tienen orgullo o es que simplemente que no tienen vocación, tal vez se piensan seres superiores a sus votantes?, no se, en serio que yo si en mi trabajo notara que la gente no aprecia mi trabajo, me piraría o me esforzaría mas si llego a la conclusión de que el que falla soy yo.
No es por desearle su final a nadie pero me gustaría saber si de estos politicuchos de hoy en día tendrán recuerdos tan emocionados y de reconocimiento sincero por su labor los habitantes de España el día que palmen.
Bueno ya termino con una frase que escuché hace tiempo en un anuncio de unos pantalones vaqueros de la marca James Dean, al final del anuncio decían " la única grandeza del hombre es la inmortalidad" . Hay algunos que ya se la ganaron siendo buenos profesionales de la política cuando España y los españoles los necesitaban.