10 noviembre 2008

Cenizas del cielo

En 1965 Frank Herbert publicó "Dune", una de las mejores novelas de ciencia ficción, quizá influido por el rollo "hippy" de Yankiland. También pudo verse influenciado por las teorías de Lovelock sobre Gaia, pero en cualquier caso, se adelantó a su tiempo.

Según el libro, en los desiertos del árido planeta Arrakis viven tribus dispersas de humanos que han aprendido a cohabitar perfectamente con su entorno, sin destruirlo, sin dejar irremediables huellas de su paso. En el lado contrario, las "multinacionales" del futuro usan Arrakis como una gigantesca mina sin importarles las consecuencias en el entorno. Herbert presenta Arrakis como un lugar donde humanos, animales y minerales forman un gran organismo "vivo", y donde cualquier cambio en el entorno afecta a todos por igual.

Cuando leí por primera vez Dune, me sorprendió el subtítulo del libro: "una epopeya ecológica". Para un lector adolescente, sólo las batallas o los grandes descubrimientos merecían ser calificadas como "epopeyas", así que abrí el libro con cierta desconfianza. En los Noventa el rollo ecologista ya estaba de moda, pero referido a las ballenas, la Amazonia y tópicos del estilo. Todavía no existía una conciencia global sobre la incidencia del progreso en el entorno.

Este fin de semana me acordé de Dune. Vi una película española titulada "Cenizas del Cielo", que me encantó. Es, por qué no, una mini-epopeya ecológica. No encontraréis planetas que salvar, pero sí una aldea, una cultura, un monte, un ternero, un cerezo, un río, un anciano, ... todos ellos en peligro de muerte por causa de un progreso mal entendido y peor gestionado. Quizá al verla pensé en mi pueblo y ello me hizo más vulnerable a la historia, pero creo que a cualquiera, incluso a alguien que jamás ha pisado el campo, le hubiera calado hondo el mensaje.

Id a verla y contadme.

12 comentarios:

  1. Zorro, te has olvidado de contar la razón de la existencia de Dune.

    Dune fue concebido como una novela de protesta política. Herbert quería llamar la atención sobre la lucha que existía en los 70 por el control del petróleo.

    Arrakis es su visión de Oriente Medio, la especia es el petróleo, y el imperio no es otra cosa que occidente.

    Un libro fascinante, qué pena que los otros 5 no estuviesen al nivel.

    ResponderEliminar
  2. Pues yo la de las Cenizas no la vi, pero este fin de semana vi otra vez Los Bingueros, y te la recomiendo... que peliculón!!!!!

    ResponderEliminar
  3. Zorro que ecológico que eres, la peli es buena, divertida a la vez que profunda y pone de manifiesto lo gilipollas que somos los humanos, como nos cargamos lo que nos da de comer (LA TIERRA), pero estoy con pasaba, donde esté el dedo de san Nepomuceno y las tetillas que se quiten las centrales térmicas.

    ResponderEliminar
  4. es difícil aguantar lluvias ácidas como la de la peli, pero creo que podré seguir aguantando vuestro ácido humor ...

    ResponderEliminar
  5. Ayer en la tele vi un rato un programa que salían cenizas, muchas cenizas ... sobre un manto verde .... con camiseta blanca, moviéndose con el viento.

    Ya sé que se trata de un trofeo menor y tal, pero bueno.... supongo que cuando pierdes en un campo que se llama Gal, poco queda por decir (bueno sí, que me reí un poco ayer... bueno, soy sincero me reí mucho) -espero que no palmemos con el Benidorm hoy-

    ResponderEliminar
  6. anda mamón, puestos a tocar los huevos, tócalos en http://veteranosynoveles.blogspot.com/ , te reíras de varios madridistas por el precio de uno

    ResponderEliminar
  7. Iré a verla , vi un programa sobre ella y me pareció muy atractiva ...lo del viejo y su esperanza de que cuando saliera lo de Kioto (o Quioto) se iba a rreglr todo .
    Pues ya te contaré , un abrazo

    ResponderEliminar
  8. Hola Zorro,
    te paso el link de esta noticia que se que te va a servir para echarte unas risas... http://www.elmundo.es/elmundo/2008/11/13/madrid/1226579995.html

    ResponderEliminar
  9. Ya sabes que soy más de campo que las amapolas, pero también soy un cavernario de esos que se niega a apoyar “nuestro cine” ese que hay que pagar dos veces, una con las subvenciones y otra en taquilla, no la veré.

    ResponderEliminar
  10. seguro que te gusta churra. Ya me dirás. Este fin de semana lo he pasado en Asturias y me he acordado de la peli.

    entiendo tu argumento, Cowboy.
    El cine español tiene que desaparecer tal como lo entendemos. Una cosa es una ayuda pública a emprendedores jóvenes (productores o directores), y otra, trabajar sobre seguro. Esto no ayuda a que se esfuercen más a la hora de distribuir y vender la peli.

    Esta película, sin actores famosos y con un 99% del mismo rodado en un huerto o en una taberna, ha disfrutado de un presupuesto de ¡dos millones de euros! ¿en qué cojones los han gastado? y encima, esos dos millones no vienen de la iniciativa privada, sino de la participación de varias entidades públicas: TVE, TV3, el Principado de Asturias, la Generalitat de Catalunya y el Ministerio de Cultura

    ResponderEliminar
  11. Me han entrado unas ganas tremendas de leer el libro y de ver la peli.
    En cuanto a la épica y las epopeyas, pienso que están en las pequeñas cosas; porque al final el todo, por mucho que sea más que las partes, sin éstas no es nada.

    ResponderEliminar
  12. La paradoja del campo: si llega el progreso, el medio rural se destruye llevándose costumbres y ecosistemas.
    Si el progreso no llega, son los jóvenes los que huyen y queda un pueblecito con su ecosistema, sus costumbres... pero todo viejos.

    También está el punto medio, claro.

    ResponderEliminar