08 junio 2008

Qué injusta es esta vida

cada vez que voy a un funeral de alguien que murió demasiado pronto me encuentro peor, más cabreado con la Suerte, o con la Providencia o con Dios o con lo que sea que decide el tiempo que nos queda. No es que no entienda la muerte. No es eso, pero no dejo de pensar en ella desde el domingo pasado. Un viaje a otra ciudad a ver por última vez el rostro de una preciosa niña que se ha ido sin advertirlo siquiera. Trescientos kilómetros conduciendo solo y viendo su cara en cada árbol, en cada coche, en el asfalto, y luego, nada. Sólo lágrimas y desgarro.
Nada más llegar al tanatorio me encontré con su padre, que había sido el mejor amigo del mío. La última vez que nos vimos fue precisamente cuando mi padre nos dejó. Un abrazo sin palabras, fuerte y tembloroso a la vez, y lágrimas de nuevo. Su hermana, su madre, todos aquellos rostros tristes y desencajados. Y ella, preciosa en aquélla urna, como la Ofelia de Millais. Era sin duda la chica más guapa de la aldea. Ahora es ya parte de su historia. Sus cenizas se confundirán con la tierra rojiza y sé que cada vez que paseemos por la aldea su recuerdo aparecerá por doquier. Mañana he de ir allí y no quiero hacerlo. Siempre me duele pasear por ese pueblo pues hay señales de mi padre por todas partes, pero mañana será aún peor.

Lo siento de verdad, Beatriz. Dice mi prima que el creer que nos volveremos a ver ayuda mucho, pero yo no creo, y tampoco puedo olvidar. Dejaré mi recuerdo de ese maldito domingo atado a ese cuadro y te recordaré a ti sonriente y llena de vida. Adiós linda.

11 comentarios:

  1. Carlitos, lo siento en el alma! Te mando un abrazo muy fuerte desde aqui, y muchisimos animos! Besos

    ResponderEliminar
  2. Lo siento Zorro y te entiendo , yo tampoco creo que tengamos nada más alla que lo que seamos en este periodo de tiempo que llamamos vida, pues en ella estamos de paso, y larga o corta tengo claro que seguimos habitando en ella y seguiremos siendo como cada uno nos recuerde durante los espacios de tiempo (largos o cortos ) que alguien se esté acordando de nosotros.

    ResponderEliminar
  3. Lo que más se echa de menos es no poder seguir viviendo cosas con esa persona. A mí no me sirve pensar en el más allá, porque les añoras aquí y ahora. Pero como dice Yañez, quien te recuerda te hace vivir. Un beso, zorro.

    ResponderEliminar
  4. gracias amigos. Llevaba toda la semana sin escribir porque no quería hacer este post, pero ... todo sigue.

    Hoy en el pueblo de mi padre he visto a poca gente. Todos me dicen que echan de menos a mi padre y yo me siento culpable por ir por allí tan de vez en cuando. Es como si me estuviese arrancando de allí poco a poco. Siento que soy de ese lugar cuando huelo la tierra roja, la madera de las sabinas, el espliego, pero tengo tantos recuerdos malos como buenos y eso no me gusta nada.

    ResponderEliminar
  5. Zorro, un abrazo.

    ResponderEliminar
  6. ciskin de los zorros.

    Me lo contó mi madre, un día que habló con la tuya y también me lo dijo el otro día tu hermano cuando kedamos. Asi de injusta es la vida.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  7. No fuerces los tiempos, Dejá paso al duelo. Es lo único que podés hacer.
    Ya pasarás de esto.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  8. Tras darle el pésame al padre de un niño que se había ido apenas quince minutos antes, padre con el que no había hablado nunca, pero que nos veíamos a diario en la sala de espera de la UVI, éste me dijo: "espero que nunca tengas el dolor que ahora tengo".

    Es una imagen que recuerdo con mucha frecuencia y ahora pienso en los padres y hermana de esa chica y por lo que están pasando. Es muy muy duro.

    Ánimo Carlos.

    Un Verineante

    ResponderEliminar
  9. Siento tu dolor Carlos... y siento el dolor de la ausencia de esa niña.
    Quiero creer que el tiempo que tuvo fue suficiente para llenar espacios, de sonrisas, de momentos compartidos, de lo que hace insustituíble a cada ser.

    Quiero creer que el dolor se transformará en comprensión y belleza.

    Te envío el más cálido de los abrazos. Te quiero.

    ResponderEliminar
  10. Que suerte compartir tantas cosas contigo....que aunque pase tiempo y no nos veamos...sepa que estás ahí...y que estuviste a mi lado en el Peor momento de mi Vida....

    Gracias...Gracias y Animo !!!!

    ResponderEliminar
  11. Zorro:

    Al final lo que queda es el recuerdo y la desdicha de no haber reunido más de esos (recuerdos) mientras el otro estuvo con vida.

    Lamento decirte que el dolor nunca pasa, solo que se manifiesta más tenuemente. Me imagino que por eso muchos viejos dicen" se ha muerto de pena", porque la pena de perder a alguien es dura y se queda ahi con nosotros. Y tambien entiendo porque la risa de un niño es tan pura, porque no alcanzan a entender lo absoluto de la muerte.

    En fin, yo con la muerte me vuelvo obscura y desdichada. Que te sea leve,

    Un abrazo,

    ResponderEliminar